Las noches de hielo pueden ser mucho más frías si se ahogan en lágrimas. Esas noches en las que al abrazar la fría piedra de la soledad, las viejas heridas de combate vuelven a sangrar.
Pues, ¿ qué clase de lunático se lanzaría a la batalla con apenas unas decenas de una infantería tan diezmada?
"Si luchas puedes perder. Si no lo intentas, estás perdido"
Y es cuando las campanas suenan al son de la muerte cuando ves unos tristes ojos brillantes. En ese instante, entiendes que es real. Hay personas que pondrían la mano en fuego por otra, y ese sentimiento es recíproco.
Y entonces todos tus esquemas se derriban, como si las ventanas se hubieran abierto y poderosas corrientes de aire irrumpieran en la habitación, transportando miles de sueños con ellas.
Pero el canto del mar se ve interrumpido por un grito desgarrador.
No me dejes ir. Ya lloré lo suficiente tu muerte.
No me dejes ir. Las campanas no tienen por qué sonar todavía.
No te dejaré ir. Mire donde mire siento tu ausencia.
Y aunque no quede nada que decir, aunque sea demasiado tarde para nosotros, para la cuenta atrás. No le des la orden al verdugo.
No lo dejes ir. No me cierres la puerta
La casualidad que nos unió fue la misma que nos hundió
Y ahora estoy sola, estoy perdida. No tengo ejército con el que luchar, ni jinete que me cubra las espaldas.
Al final, llega el maldito invierno. Llega el frío y la soledad. Y aún canta nuestra canción algún jilguero perdido, pero... no suena igual sin ti.
Los sueños del ayer duelen como pesadillas hoy.
Para la locura, no dejes que explote.
Vuelve, y abrázame ahuyentando mis pesadillas, como solo tú sabes.
Sé que te di más motivos para irte que para quedarte, pero ya no podía sentir el paso del tiempo mi corazón roto cual reloj irreparable.
Porque yo no buscaba a nadie, y fue entonces cuando te encontré a ti. Desde el primer momento, te convertiste en mi razón para respirar, pero tú tan solo repetías:" Me enseñó que amar es destruir, y ser amado es ser destruido".
¿Cómo intentarlo oyendo eso?
¿Cómo no ilusionarse compartiendo tantas sonrisas?
El virus se extiende, la enfermedad nos va consumiendo.
Pongamos fin a esta tortura, tan solo digamos adiós.